Este domingo, la localidad de Chimpay se transformó en el corazón de la fe y la tradición al recibir a miles de peregrinos que se reunieron para rendir homenaje a Ceferino Namuncurá.
En una conmovedora muestra de devoción, personas de toda la región llegaron al lugar para participar en la 54ª peregrinación y conmemorar el 148º aniversario del nacimiento de Ceferino.
Desde tempranas horas, los caminos hacia Chimpay se llenaron de fieles, muchos de los cuales recorrieron largas distancias en bicicleta, mientras que otros optaron por llegar a caballo. Todos compartían un objetivo común: honrar la figura de Ceferino Namuncurá, quien es venerado por su vida de humildad, fe y servicio a los demás.
La peregrinación de este año no solo destacó por la cantidad de participantes, sino también por la profunda conexión espiritual que se percibía en el ambiente. Cada paso, cada oración, reflejaba el compromiso y la devoción de los peregrinos hacia Ceferino, un símbolo de esperanza y unidad para muchas personas en la región.
La jornada fue una verdadera celebración de la fe compartida, con actividades religiosas que incluyeron misas, bendiciones, y momentos de reflexión dedicados a honrar la vida y legado de Ceferino Namuncurá. Las autoridades locales y representantes religiosos expresaron su gratitud a los participantes por mantener viva esta tradición y por fortalecer los lazos de comunidad y espiritualidad.
El homenaje a Ceferino Namuncurá en Chimpay se ha convertido en una tradición anual que no solo refleja la devoción de los peregrinos, sino también la riqueza cultural y espiritual de la región. Este evento sigue siendo un testimonio del poder de la fe para unir a las personas en torno a valores compartidos y en la búsqueda de la paz interior y el bienestar colectivo.
La devoción hacia Ceferino Namuncurá continúa creciendo año tras año, demostrando la fuerza espiritual y el compromiso de una comunidad que, con cada peregrinación, renueva su fe y esperanza en un futuro mejor guiado por los principios de amor, solidaridad y respeto que Ceferino encarnó durante su vida.