Javier Milei anunció que se pone en marcha el plan de “emisión de deuda cero” y que solo irán al mercado para refinanciar vencimientos. Los inversores, sin embargo, esperan novedades sobre el cepo y más certezas de la capacidad de pago de la deuda que vence en 2025 para redoblar la apuesta.
Según el vocero presidencial, Manuel Adorni, el Gobierno ya hizo todo lo que debía para luchar contra la inflación y lo consideró un “capítulo cerrado”. Pero ahora la energía del equipo económico y del propio Presidente empieza a concentrarse en otro objetivo: acelerar la caída del riesgo país.
Javier Milei lo expresó claramente ayer al disertar en el cierre del evento anual del Consejo de las Americas: “No vamos a emitir nueva deuda, porque el Presupuesto 2025 tendrá superávit primario suficiente incluso para pagar los intereses. Eso implica que la deuda en relación al PBI irá cayendo, por lo que deberíamos ver que se desploma el riesgo país”.
Luego de sus declaraciones, los bonos dolarizados aceleraron su recuperación y terminaron entre 1,5% y 2% arriba. Esto también se reflejó en una reducción de 2,6% del riesgo país, que terminó en 1515 puntos básicos.
Las palabras del Presidente reflejan que el objetivo del Gobierno se basa esencialmente en insistir con el superávit primario y que quede ratificado en el Presupuesto 2025. “El equilibrio fiscal es algo indiscutible”, sentenció Milei.
El enfoque oficial difiere a la sugerencia de muchos analistas y bancos que ponen el foco en la necesidad de salir del cepo cambiario para mejorar la confianza del mercado y que eso permita eliminar las restricciones cambiarias.
Pero el foco del Gobierno ahora es cerrar otra canilla de emisión, pero en este caso de la deuda. “Solo vamos a refinanciar vencimientos, no vamos a emitir nueva”, agregó Milei.
El planteo no es muy distinto al que el propio Gobierno hace en el plano monetario. La no emisión de pesos es el motivo de baja de la inflación y de la estabilidad cambiaria. De la misma forma, si no se emite nueva deuda esto tendría que ayudar a que se recupere el valor de los bonos.
La reducción del riesgo país es un tema central para lo que se viene. Si baja lo suficiente, el Gobierno estaría en condiciones de refinanciar los vencimientos futuros de la deuda con la colocación de nuevos títulos.
Claro que el camino para lograrlo es arduo, ya que la caída de este índice deber ser a no menos de 800 puntos básicos. Esto no sucede desde el 2018, antes de que se desate la crisis cambiaria que estalló en la última etapa del gobierno de Mauricio Macri.
Mientras tanto, la situación es compleja. Ni el riesgo país cae lo suficiente ni hay señales claras sobre lo que podría ocurrir con los controles cambiarios. Luciano Laspina, economista y diputado del PRO, consideró que “el cepo va a durar mucho más tiempo de lo que el mercado cree, porque el Gobierno no quiere asumir los riesgos de unificar el tipo de cambio”.
Recuperar el acceso a los mercados financieros para refinanciar la deuda es un objetivo central del Gobierno de cara al 2025. Para eso prometen más superávit fiscal, que alcance para pagar incluso los intereses de la deuda. En los últimos días los bonos operaron más firmes, pero el riesgo país igual sigue arriba de los 1.500 puntos
Mientras tanto, la expectativa está puesta en el 30 de septiembre. Un informe para clientes de Adcap Grupo Financiero indicó que “para ese momento, esperamos noticias relevantes respecto a la acumulación de reservas, particularmente por la venta del sector agro por USD 10.000 millones y el régimen de regularización de activos, que se estima entre USD 20.000 y USD 40.000 millones”.
“Esperamos que el piso de USD 40 se mantenga si el Gobierno logra asegurar el pago de enero 2025 (por USD 4.500 millones) y que se rompa el techo de $45 si la acumulación de reservas es suficiente para cubrir dos pagos, incluyendo también julio del año próximo por otros USD 4.500 millones.
Esto significa que los brokers esperan que el equipo económico pueda dar muestras de tener capacidad de pago, en un contexto de reservas negativas por cerca de USD 6.000 millones. Estas dudas por la capacidad de conseguir fondos frescos es lo que posiblemente le ponga un piso bastante alta a la posibilidad de disminución del riesgo país al menos en los próximos meses
Fuente Infobae (Por Pablo Wende)