Este lunes, el vocero Adorni confirmó que se reforzó la seguridad de puntos sensibles en todo el país, tras el ataque de Irán a Israel.
El país reforzó la seguridad de espacios vinculados a Israel y a la religión judía ante la escalada del enfrentamiento en Medio Oriente, luego del ataque de Irán. Esto se vio reflejado en Neuquén y Río Negro, con presencia de móviles afuera de los centros de la comunidad hebrea.
Según explicó el vocero presidencial, Manuel Adorni, este lunes, se ha aumentado la seguridad en «todos los objetivos, los sitios o los espacios donde se cree que, efectivamente, son lugares más sensibles como para, en este momento de gran confusión tener seguridad adicional».
Agregó que también «se están tomando todas las medidas necesarias para tener un mayor control en la frontera debido a esta situación».
Adorni se encargó de resaltar que desde el Gobierno no consideran que el posicionamiento de Javier Milei a favor de Israel genera una situación especial de peligro, sino que creen que se trata de una tensión general ante la que se toman medidas de prevención.
«Acá no hay una distinción de si Argentina es o no un punto de riesgo, creemos que el mundo es un punto que hoy está en riesgo», describió y, luego, aclaró que «el presidente no ha recibido amenazas».
Uno de los puntos en lo que se observaron móviles policiales es el Centro Social y Cultural Israelita de Allen, Cipolletti y Neuquén, de la calle Irigoyen, en Cipolletti.
En San Martín de los Andes también se observaron móviles, en este caso de la Policía Federal, en la sinagoga de la calle Rohde.
Mario Jakszyn, quien está a cargo de las actividades y de oficiar el servicio, explicó a Diario RÍO NEGRO que la custodia «no es solo para la comunidad, sino para todo el mundo. Es un lugar en la ciudad, hay un edificio arriba, una confitería al lado y es una protección para todos los vecinos».
Jakszyn recordó que ya habían tenido la presencia de móviles cuando, el 7 de octubre del año pasado, Hamás atacó a Israel y secuestró ciudadanos.
Detalló que se hacían rondines y había un móvil durante los servicios, pero nunca tuvieron ningún inconveniente.
Fuente RN