Uno de los niños sigue en estado delicado, mientras que los otros dos ya fueron dados de alta. La fiscalía imputó a un detenido y busca a tres cómplices por el brutal ataque.
La comunidad de Neuquén sigue conmocionada tras el tiroteo ocurrido en la toma La Familia, donde tres niños resultaron baleados mientras se encontraban dentro de una vivienda. El episodio, que tuvo lugar en la madrugada del lunes, dejó en estado grave a un niño de tres años, mientras que los otros dos pequeños, de cinco y diez años, ya fueron dados de alta.
Yanina, tía de los menores, pidió justicia y se refirió al estado de salud de su sobrino más afectado. Según informó, el pequeño que recibió un disparo en la parte frontal de la cabeza sigue internado en el Hospital Castro Rendón y lucha por su vida. “Nos dicen que se encuentra estable, va evolucionando y mejorando día a día”, declaró en diálogo con Radio 7. En tanto, sus otros dos sobrinos están fuera de peligro y en recuperación. El niño de cinco años fue operado por una fractura en el brazo y deberá seguir controles médicos.
Un pedido de justicia y cautela ante rumores
En medio del dolor, la familia de los niños pidió cautela frente a versiones que circularon en el barrio Belgrano, cuestionando a la madre de los pequeños. Yanina rechazó estas acusaciones y aseguró que su cuñada “siempre luchó por sus hijos” y que las críticas carecen de fundamento. En ese sentido, explicó que la mujer permanece en el hospital acompañando a su hijo más delicado, mientras que los otros dos niños están al resguardo de una tía hasta que la situación se estabilice.
Sobre el contexto del tiroteo, la tía detalló que ocurrió en la casa de la abuela de los niños y que fue un hecho inesperado. “Es la primera vez que pasa algo así, nunca habían tenido problemas. Justo ese día mi cuñada los llevó porque al otro día tenía que hacer trámites”, sostuvo.
“Fueron directamente a matar”, denunció el abuelo de los niños
Paola González, abuela paterna de los menores, expresó su angustia por la situación y pidió a la comunidad que se sumen a una cadena de oración por la recuperación de su nieto de tres años. Además, reclamó justicia y confió en que los responsables serán identificados y castigados.
Por su parte, el abuelo de los niños fue contundente en su declaración y descartó que el ataque haya sido un enfrentamiento entre bandas. “Fueron directamente a matar, el auto frenó y dispararon. No hubo ningún disparo desde adentro hacia afuera”, afirmó con indignación. Su testimonio refuerza la hipótesis de que el ataque fue premeditado y que los responsables abrieron fuego de manera indiscriminada contra la vivienda.
Un detenido y tres sospechosos en la mira
Mientras la familia clama justicia, la investigación judicial avanza. La fiscalía logró detener a un hombre, quien ya fue imputado por tentativa de homicidio, y trabaja en la identificación de tres cómplices que habrían participado del ataque.
Según los datos recopilados por el Ministerio Público Fiscal (MPF) y la Policía provincial, el ataque ocurrió alrededor de las 0:50 del lunes. El acusado, junto a otras tres personas, llegó en un Renault Fluence hasta la manzana 10, lote 2 de la toma La Familia, y abrió fuego contra la vivienda. Luego, escaparon rápidamente por calle Copahue.
Expectativa por avances en la causa
El fiscal del caso, Andrés Azar, formuló cargos contra el detenido y continúa con las diligencias para dar con los otros involucrados en el violento episodio. La comunidad espera respuestas y confía en que se hará justicia para los niños que fueron víctimas de este ataque sin sentido.
Mientras tanto, el niño de tres años sigue internado, luchando por su vida, mientras su madre y el resto de la familia se aferran a la esperanza de su recuperación.
