Se suma una nueva tasa de esta índole, en este caso aplicable a partir del año próximo, a nivel provincial que puede superponerse a otras existentes a nivel municipal
La Legislatura misionera aprobó el Presupuesto Provincial para el año próximo y con ello una “tasa turística” aplicable a turistas extranjeros desde 2025.
Así se suma a la que ya rige en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y en sintonía con la que impulsa una ordenanza para la ciudad de Ushuaia. Se estaría produciendo un efecto dominó, pese a algún fallo adverso de la justicia.
Si bien la provincia de Misiones cuenta con varios puntos de atracción turística, las Cataratas del Iguazú es la que convoca mayoritariamente a los visitantes y de ese modo, la nueva tasa turística se sumará a la que ya cobra el municipio de Puerto Iguazú.
La tasa creada, según lo estipulado en el presupuesto, será destinada “a retribuir la prestación de servicios que preste la Provincia de Misiones” que demanda el mantenimiento, conservación, modificación y/o mejoramiento del turismo.
En ese sentido incluye el desarrollo de infraestructura, capacitación de recursos humanos, promoción y marketing del turismo. Y agrega, todo otro servicio destinado a la protección y conservación del medio ambiente, condicionado por la actividad turística.
Como puede observarse la asignación de lo recaudado abarca un amplio abanico de aplicaciones.
En lo que hace a los aspectos tributarios, la norma no es todo lo precisa que debiera y prácticamente deja en manos del Poder Ejecutivo la instrumentación e implementación. Es decir, delega en el Ejecutivo, lo que no es aconsejable en materia tributaria.
La definición de base imponible que surge de la norma no otorga certeza ya que expresa que estará “constituida por un monto fijo por estadía” que abonará el turista extranjero que se hospede en la provincia. Parece confundirse el concepto de base imponible con el monto a pagar.
Según algunos trascendidos el importe a pagar se ubicaría entre 1 o 2 dólares EE.UU. y se recaudaría a través de los agentes de percepción, en principio, hoteles de tres, cuatro y cinco estrellas y los alquileres temporarios a través de plataformas.
También se faculta al Ejecutivo misionero para que con los recursos obtenidos, cree un fondo para promocionar y potenciar el turismo internacional.