El titular del organismo comenzó a pasar a disponibilidad a cientos de agentes. Hubo cambios en los sectores de análisis, contrainteligencia, reunión y apoyo, entre otros. “Queremos echar a todos los que no estén alineados con nuestra idea de Inteligencia”, expresó a TN un funcionario cercano a la central.
El Gobierno avanza con la reestructuración del personal de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) mientras busca frenar el rechazo del DNU que le otorgó $100.000 millones en gastos reservados. El Ejecutivo quiere retrasar la votación en el Senado, pero reconoce que no tiene los votos para evitar su rechazo en el recinto.
El titular de la SIDE, Sergio Neiffert, comenzó a pasar a disponibilidad a cientos de agentes de la gestión kirchnerista. Hubo cambios en los sectores de análisis, contrainteligencia, reunión y apoyo, entre otros. La planta se compone de 1800 agentes.
“Queremos echar a todos los que no estén alineados con nuestra idea de Inteligencia. La idea es reformar el organismo, pero no todos los que pasaron a disponibilidad van a ser desplazados. Algunos van a ser reasignados”, expresó a TN un funcionario cercano a la central.
Es por eso que el Ejecutivo le solicitó a la Justicia los expedientes de las causas que involucran a espías: quieren evaluar su trayectoria. Ya dio de baja además muchos contratos anuales e intentó acelerar el proceso jubilatorio de algunos agentes de planta permanente.
La mesa chica de Balcarce 50 sostiene además que va a revisar los agregados exteriores que designa la central de Inteligencia. Hubo ruido interno por el nombramiento en la embajada de Madrid del exsecretario administrativo del Ministerio de Capital Humano, Agustín Sánchez Sorondo, que dejó la cartera en febrero en medio de reclamos de las organizaciones sociales por los alimentos.
El Gobierno quiere reestructurar el sistema de rendimiento de cuentas de la Secretaría de Inteligencia. Apunta a que se pida presupuesto por misión y a que los agentes presenten el sobrante del operativo junto a la notificación de si hubo financiamiento de un servicio externo.
El Ejecutivo niega haber gastado el 78% del presupuesto secreto que le fue asignado por decreto. Mantiene la postura de que los $78.000 millones figuran como devengados porque ya tienen un destino asignado. “Los $100.000 millones se van a usar para comprar el equipamiento que se llevó la gestión de Caamaño”, expresó a TN un alto funcionario.
La cúpula de la SIDE busca conformar la estructura de las cuatro agencias que la componen: Servicio de Inteligencia Argentino (SIA), Agencia de Seguridad Nacional (ASN), Agencia Federal de Ciberseguridad (AFC) y División de Asuntos Internos (DAI), que todavía no tiene titular.
El Gobierno eligió a un juez federal para que presida la DAI y espera que avance con su pedido de licencia en el corto plazo. Circularon los nombres de Sandra Arroyo, Ariel Apolo y Jorge Rodríguez, pero en Nación evitan dar precisiones.