La ciudad de Cipolletti atraviesa una crisis sin precedentes en su cementerio municipal, donde la falta de espacio y las deudas prolongadas han llevado a la municipalidad a tomar una medida drástica.
El Ejecutivo local, liderado por Rodrigo Buteler, emitió una resolución que establece un plazo de 15 días para que los familiares morosos regularicen los pagos o retiren los restos de sus seres queridos. Esta medida busca evitar el colapso total de las instalaciones, que no cuentan con terreno disponible para nuevas inhumaciones ni con recursos suficientes para financiar cremaciones gratuitas.
La situación, que ha sido catalogada de emergencia, responde a una deuda acumulada por más de 3,000 familias que, en algunos casos, supera los 20 años. Desde el municipio aseguran que intentaron contactar a los deudores en repetidas ocasiones, sin éxito, lo cual dejó como última alternativa esta intimación. La gestión de Buteler se enfrenta, además, a un contexto de emergencia económica que limita los recursos municipales para cubrir el costo de las cremaciones, actualmente calculado en más de 38 millones de pesos para un centenar de casos.
Un cementerio al borde del colapso y una deuda insostenible
En la resolución emitida, el área de Servicios Públicos alerta sobre la falta de fosas disponibles y la imposibilidad de abrir nuevos espacios. Esta situación ha generado un punto crítico en el que las cremaciones, una medida frecuente para liberar espacio en el cementerio, se han vuelto insostenibles financieramente. El colapso del cementerio refleja, además, un problema estructural de años, acentuado ahora por el contexto económico del municipio.
La municipalidad advierte que, de no recibir respuesta de los deudores, se procederá a tomar las medidas legales necesarias para liberar los espacios. En este sentido, la resolución insta a los familiares vinculados a nichos, bóvedas y sepulturas a presentarse en el plazo establecido para regularizar su situación. Aunque se trata de una medida extrema, el municipio considera que es el único camino viable para mantener la operatividad del cementerio.
Con esta iniciativa, la ciudad de Cipolletti busca enfrentar de manera urgente un problema que afecta tanto a la gestión pública como a las familias que necesitan espacios para dar sepultura a sus seres queridos.