La municipalidad de Cipolletti enfrenta un nuevo caso de fraude laboral tras el anuncio de un tercer despido en el mes por el uso de certificados médicos falsificados.
La medida fue anunciada por el intendente Rodrigo Buteler, quien expresó su rechazo a las prácticas que “ensucian a los trabajadores de bien” y “defraudan a los contribuyentes”. Este caso se suma a otros dos despidos recientes y a una serie de investigaciones por irregularidades similares que buscan limpiar la gestión municipal de prácticas fraudulentas.
Buteler explicó que el uso de certificados truchos representa una falta grave, especialmente en el contexto de una administración que trabaja en la mejora de los servicios públicos. “Estamos ordenando la ciudad y el orden empieza por casa”, señaló. Para el intendente, tolerar este tipo de comportamiento sería injusto con los empleados que cumplen sus funciones y con los vecinos que aportan al erario público.
Este tipo de faltas no es nuevo en la gestión municipal de Cipolletti. En agosto, dos empleados fueron suspendidos sin goce de sueldo por el mismo motivo, y una auditoría interna detectó a trabajadores que presentaban licencias médicas con firmas falsas, incluyendo la de un médico fallecido. Estas irregularidades derivaron en una investigación penal y en la implementación de medidas disciplinarias internas a cargo de la Junta de Disciplina.
Ante la reiteración de casos de certificados falsos, el municipio de Cipolletti ha tomado varias acciones. En septiembre, Buteler firmó un convenio con la secretaria de la Función Pública, Tania Lastra, para que los agentes municipales puedan acceder a licencias por enfermedades de largo tratamiento mediante una evaluación por la Junta Médica. Este equipo está compuesto por profesionales de distintas áreas de la salud, lo que permite una revisión exhaustiva y un dictamen independiente.
Este acuerdo se estableció no solo para agilizar el acceso a licencias justificadas, sino también para fortalecer el control sobre las licencias médicas presentadas. Al contar con un equipo especializado, el municipio busca reducir al mínimo la posibilidad de fraude y mejorar la transparencia en la gestión de licencias médicas.
La administración de Buteler sostiene que estas medidas forman parte de una política de “tolerancia cero” contra las prácticas deshonestas. A través de acciones disciplinarias y colaboración con las autoridades judiciales, el municipio aspira a restaurar la confianza y el compromiso en los servicios públicos de Cipolletti.
