La provincia enfrenta el desafío de renovar las concesiones de 23 yacimientos petroleros antes del 12 de diciembre. Las altas exigencias económicas impuestas por el gobierno complican las negociaciones con las principales operadoras, que advierten sobre la falta de rentabilidad en varias áreas.
A pocos días del vencimiento de los plazos establecidos, la provincia de Río Negro aún no ha firmado la prórroga de las 23 concesiones petroleras en negociación. Este retraso obligará a un tratamiento exprés en la Legislatura provincial para cumplir con los requisitos legales antes del 12 de diciembre, fecha límite para su aprobación definitiva.
Según confirmó Mariela Moya, secretaria de Hidrocarburos de la provincia, ninguna empresa ha cerrado acuerdos hasta ahora debido a las exigencias económicas establecidas en la Ley 5733/24, aprobada en julio pasado. La normativa otorga un período de 60 días para negociar las condiciones de las prórrogas, un plazo que muchas empresas consideran insuficiente, especialmente por los altos costos que demanda el proceso.
Exigencias económicas en el centro de las críticas
Las empresas involucradas, entre ellas YPF, Tecpetrol, Vista y Aconcagua Energía, señalaron que las regalías del 15%, los cánones de prórroga, los planes de inversión y los bonos extraordinarios solicitados por la provincia dificultan alcanzar un acuerdo. “Algunas áreas no son rentables con estas condiciones, y devolverlas parece más viable”, afirmó el CEO de una de las compañías, bajo anonimato.
Las petroleras también cuestionan que estas exigencias contrastan con políticas más flexibles de provincias vecinas, como Mendoza, que recientemente adjudicó áreas con regalías reducidas al 12%. Además, destacaron que las condiciones de los yacimientos convencionales no son las mismas que hace una década, por lo que mantener las mismas demandas resulta insostenible.
Impacto en la inversión y desafíos futuros
El dilema actual no solo pone en riesgo la continuidad operativa de las áreas, sino también el nivel de inversión en exploración y desarrollo. Con 23 concesiones cerca de su vencimiento entre 2025 y 2027, las negociaciones afectan a bloques clave como Río Neuquén, Puesto Flores/Estancia Vieja, y Jagüel de los Machos.
El gobierno provincial enfrenta ahora el desafío de equilibrar sus demandas con las posibilidades de las empresas para garantizar la sostenibilidad de la producción petrolera y evitar que las áreas queden inactivas. La próxima semana será decisiva para definir el futuro del sector en Río Negro.